El Antiguo Comentario

El Antiguo Comentario

El Misterio de Shambhala (I)





Otra Génesis

            Lo que sigue es otra manera de presentar la Génesis, el proceso de generación del planeta Tierra y del Ser humano tal como ha sido transmitido desde tiempos inmemoriales por la Gran Tradición Trashimaláyica, el Mahayana, Hermes Trismegisto, los Gnósticos y las desarrolladas culturas pre-cristianas.
William

Imagen de Francisca Blázquez

Primera Parte
La génesis de Gaia
 **
                Siguiendo el camino de Shambhala
El camino de Shambhala conduce al “Centro donde la Voluntad divina es conocida”. El Mahayana Lo llama el “eterno Núcleo de Fuego galáctico” y la antigua tradición gnóstica, el “Pleroma”. Hace millones de años, la Energía creadora de esta Voluntad galáctica se ancló en un lugar del planeta Tierra llamado la Isla Blanca. Es una pequeña isla, en su tiempo, frondosa. Estaba situada en medio de lo que era entonces el Mar de Gobi, ahora un inmenso desierto.
*
El Morador de Shambhala
         Sanat Kumara es el morador de Shambhala. Es la personalidad-alma de Gaia, la apariencia física de nuestro planeta. Gaia está en estrecha conexión con nuestro Logos solar. Eso estimula Sanat Kumara, el Alma de Gaia. Le incita a manifestar el “Principio de Síntesis” de los 3 Fuegos divinos que, mediante el Astro solar, emanan del eterno Núcleo de Fuego galáctico. Estos tres Fuegos son:  
-el Fuego eléctrico (la Voluntad creadora cósmica), 
-el Fuego solar (el Poder animador del Amor, el Cristo cósmico) y 
-el Fuego Escondido (la sapiente inteligencia creativa cósmica, Sofía). 
Sanat Kumara realiza la fusión de estos tres Fuegos galácticos y así manifiesta, como personalidad-Alma de Gaia, la Tríada divina planetaria en el físico denso.
*
La decisión de Sanat Kumara
        Sanat Kumara decidió encarnar en Gaia como personalidad-Alma. Provocó un Concilio solar presidido por el Logos solar. En la asamblea  conciliar estaban presentes los Señores del Karma del planeta Gaia y los representantes de las 7 logias de la gran Fraternidad blanca, representando los  grandes Seres y expresando las 7 cualidades primarias  cósmicas. La asamblea aceptó la decisión de Sanat Kumara, porque era un Adepto del Ashram galáctico de Sofía (o Isis, Venus, la Gran Madre…), que encarna la divina Inteligencia creativa en el planeta Gaia. Además, había adquirido la 9ª iniciación y tenía un grado elevado de parentesco con el Logos planetario Gaia.

*
El proceso de descenso de Sanat Kumara
         El proceso de descenso de Sanat Kumara inició el evento sideral de la llegada al Sistema solar de las 7 Cualidades creadoras primarias emanando del “eterno Núcleo de Fuego galáctico”. Luego, cuando se realizó el   alineamiento cósmico del Sistema solar con la constelación de la Osa Mayor, Sanat Kumara envió los Devas solares azules al planeta Gaia. Tenían como tarea preparar Su venida y construir el ‘Antahkarana’ o canal de conexión con la Inteligencia creativa de Sofía.  Al mismo momento eligió además sus 3 Kumaras acompañantes, los Señores de la Llama. El Antahkarana sofiánico les ofreció la facultad de dinamizar el Kundalini de Gaia. Les ayudan en esta tarea la “gran inmigración celeste dévica”. Debido a estas circunstancias favorables,  Sanat Kumara se sintió listo para realizar Su ‘gran Descenso’. Llegan con Él los 110 Iniciados pertenecientes al gran Ashram de Sofía. Serán el origen de la Jerarquía espiritual planetaria. Gracias a esta amplia labor y colaboración celestial, Sanat Kumara adquiere el título sagrado de “Alma del Mundo”. Le da el honor de crear el Antahkarana solar. Eso Le permite, según el arquetipo “ANTROPOS”,  canalizar y fusionar los 3 Fuegos, eléctrico, solar y oscuro, para que así sea manifestada, mediante la Raza de los Hombres, la Tríada divina de Gaia-Sofía


I.                   La emanación de las 7 cualidades galácticas

Imagen de Liane Collot d'Herbois
Desde el Eterno Núcleo de Fuego galáctico (El Pleroma de los gnósticos) emanan las 7 cualidades cósmicas de la facultad creativa Suya. Llegando a nuestro Sistema solar, son simbólicamente focalizadas, según las Tradiciones gnósticas y el Mahayana, por los 7 esquemas planetarios: Vulcano, Júpiter, Saturno, Urano, Tierra, Venus, y Neptuno. A estas 7 cualidades primarias, la Tradición cristiana las llama “los 7 Espíritus delante el Trono de Dios”. Llegan por 7 canales galácticos de aproximación. Irradiadas con gran generosidad por nuestro Sol, las cualidades de cada Espíritu tienen un cometido específico que cumplir. Revelan, cada uno a la perfección, un aspecto del Sueño singular de la Divinidad galáctica, para que aparezca en nuestro Sistema solar un modelo original del arquetipo ‘Antropos’. La Inteligencia creativa cósmica de Sofía, ‘la Sapiente’, presidirá la obra. Los Devas constructores cósmicos la realizarán.
Y así apareció el hermosísimo planeta Gaia. De Su maternidad biológica nacerá un Ser humano de esencia vital divina. Gaia será Su espacio edénico de experimentación.


II.                La llegada de los Señores de la Llama y de los Devas solares azules
         El Concilio solar decidió que la manifestación en Gaia del elegido Adepto Sanat Kumara se realice en el momento muy oportuno del divino alineamiento del Sistema solar con una Estrella, aún no revelada, de la Osa Mayor.
         Esperando este solemne momento de alineamiento cósmico, Sanat Kumara decidió elegir 3 acompañantes pertenecientes al Ashram venusiano de Sofía, la Sapiente. La Tradición inmemorial los llama “los Señores de la Llama”. Constituirán con Sanat Kumara como foco céntrico nuestra Tríada de Fuegos cósmicos. Asimismo, Sanat Kumara envió una cohorte de Devas solares azules. Prepararán Su manifestación en el esquema de la Tierra y construirán la línea de conexión con la divina Sofía, el Antahkarana sofíanico.


III.             La construcción del Antahkarana sofíanico
Los Devas azules tenían como tarea principal introducir en la “Isla blanca” un talismán secreto dinamizado por el Logos solar. Desde el poder de este talismán, los Devas azules han podido establecer el conducto de comunicación intensa entre Gaia y Sofía. Ha nacido el Antahkarana sofiánico (o venusiano).


IV.             El gran descenso de Sanat Kumara
Una vez esta potente línea de comunicación establecida, al momento preciso de la gran Alineación solar con la Osa Mayor, Sanat kumara empezó el gran peregrinaje de descenso con sus Kumaras acompañantes.
Llegando a Gaia por el Antahkarana sofiánico, los Kumaras empezaron desde la Isla blanca, al servicio de Sofía, a fertilizar y potenciar el dinamismo del Fuego oscuro, el Fuego Kundalínico de Gaia para que así incremente la variedad de las formas de Vida en los 4 Reinos terrestres, mineral, vegetal, animal y humano.
El Antahkarana sofiánico permitió también la participación muy efectiva de las jerarquías dévicas o angélicas, llamadas “la gran inmigración celeste”. Realizaron, ellas también, grandes cambios y variaciones. Enriquecieron, inspiradas por el ensueño de Sofía, la naturaleza de todos los Reinos.
Además, vía el conducto Antahkarana sofiánico, llegaron a la Isla blanca 110 iniciados del Ashram de Sofía, así como los llamados Devas verdes, violetas y carmín.
Es también en la Isla blanca, donde empezó potencialmente la actividad de nuestra propia Jerarquía espiritual planetaria. 


V.                La construcción del Antahkarana solar

Por la abertura del Antahkarana sofiánico o venusiano se cumplió en el esquema Gaia la Presencia de Sanat Kumara, de sus 3 acompañantes Kumaras y de los Señores de la Llama.
Imagen de Liane Collot d'Herbois
Por la intercesión del Fluido de Amor crístico afluyendo desde el Sol, la labor de la gran inmigración celeste dévica, las existencias terrenales se impregnaron profundamente del Espíritu divino de Servicio de Gaia-Sofía.
En virtud de esta amplia colaboración celestial, Sanat Kumara podía adquirir el título sagrado de Alma del Mundo”. Esta función elevada Le permitió crear con los Devas azules otra línea de comunicación, el Antahkarana solar’. Lo realizaron mediante otro talismán secreto ahora implantado en el Sol mismo.
Sanat Kumara tenía ahora la capacidad de canalizar armoniosamente y en conjunción el Fuego eléctrico de la Voluntad creadora, el Fuego solar con su Flujo de Amor crístico y el Fuego escondido de la Inteligencia activa de Gaia-Sofía.
         Le permite expresar a través del Ser humano encarnado en Gaia-Sofía todas las cualidades galácticas inherentes al “ANTROPOS”, esta singularidad divina soñada desde la Conciencia cósmica del ‘eterno Núcleo de Fuego galáctico’.
*
Nota: En la segunda parte presentaremos la Génesis del Ser humano.

William
oOo


No hay comentarios:

Publicar un comentario